Enseñar es mi preocupación, enseñar a veces es contraproducente, mata la emoción del descubrir y sin emoción no hay aprendizajes, forzar los procesos no es bueno, trato siempre de agregar emoción en las clases, hay emociones positivas que nos conectan y hay emociones negativas que nos desconectan, el mayor trabajo de un docente no debe ser en el aula, es en la planeación de ese ambiente de aprendizaje donde se realiza el trabajo pesado, una clase debe ser muy parecida a un parque de diversiones, es un laboratorio de experiencias y debe ser un foco para la inspiración.
La educación que dábamos en los colegios era muy informacional, hoy tratamos de agregarle el tercer elemento (tic) y cambiar hacia un modelo bimodal que logre un equilibrio entre la teoría y la práctica.
El día que vimos el vídeo de Isaac Asimov ; trabajamos el desarrollo y componentes de un PLE o APA en el aula, ese día me pregunté si sería posible que cada persona seleccione sus profesores y arme su paquete y con ayuda de una universidad después valide esos aprendizajes, hay muchos interrogantes que tengo respecto al futuro de la educación, pero tengo mucha fé en ella por que ella es esperanza de una revolución no violenta como lo dice Fernando Savater.
Yo parto de algunas premisas que he aprendido a lo largo de estos años, una de ellas es que nadie aprende lo que no quiere aprender, y por eso los docentes somos motivadores mas que enseñadores, la época de explicar creo que ya pasó, a veces cometo el error de explicar mucho y eso es lo que no quiero, cada individuo debe aprender a su ritmo y por convencimiento propio no por obligación, aprender es algo divertido y maravilloso, no debe convertirse en una tortura.
En la última sesión los docentes estuvieron trabajando con el apoyo de los chicos y me pareció que ese trabajo silencioso es de un gran valor, da tranquilidad ante el estrés que puede generarnos este proceso.
Espero que alguna vez la educación evolucione a motivaciones intrínsecas, donde cada uno aprenda por pasión las cosas que le interesan y no se le tenga que imponer a nadie ningún aprendizaje.
De cada sesión realizo una reflexión por que así como mis estudiantes aprenden algo en la clase, yo como docente también quiero aprender.
Felicito a tod@s los docentes por su gran esfuerzo y tenacidad, que aunque hemos tenido muchas dificultades técnicas con la velocidad del Internet y algunos equipos que no han funcionado, los docentes han buscado alternativas para solucionar las dificultades.
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